¿Qué BUSCAN?

5° Marcha Lésbica

 (lesbianas guerreras sembrando dignidad) 

El movimiento de LESBIANAS FEMINISTAS de México cuenta con más de 34 años de historia y trabajo ininterrumpido por la emancipación de las mujeres. Desde entonces, su propósito fundamental ha sido eliminar la opresión que el patriarcado por milenios ha ejercido contra la población femenina por el sólo hecho de ser mujeres, hacerse visibles en el mundo donde el espacio público ha sido dominado por los hombres; lograr la autonomía de ese sector social y convertirse en sujetas sociales plenas e integrales superando la dependencia histórica que se les ha impuesto respecto a los varones.

Hoy la humanidad y el planeta dependen de la fuerza creadora y participación activa de las mujeres para crear los fundamentos de un nuevo sistema económico, político y social internacional; justo y armónico en beneficio de todos los seres del planeta. Rechazan determinantemente el continuar utilizando a las mujeres como reproductoras del patriarcado. Asimismo objetan las reformas de violencias tradicionales e innovadoras, directas y sutiles, que continúan perpetuando la opresión de más de la mitad de la humanidad.

Las lesbianas han sido y son la punta de lanza en lo ideológico, como en la movilización política de las mujeres y particularmente del movimiento feminista, así también son parte del movimiento de mujeres y de las oprimidas del mundo, en tanto: obreras, campesinas, indígenas, migrantes, desempleadas, pobres, discapacitadas, estudiantes, artistas, activistas, presas, madres, etc.

A partir del 2003 realizan su propia  Marcha Lésbica, en el mes de marzo – de simplemente mujeres-, por ello a diferencia del movimiento LGBT (lésbico, gay, bisexual y transexual), la de ellas no es un carnaval comercial y mercantil sin contenido social, sino una manifestación política (no partidista), porque saben que si no hay liberación de la mujer, no habrá liberación del resto de las oprimidas del mundo y que el sector de mujeres juega un papel cada vez más importante no solo en la producción de la riqueza social, sino en la posibilidad de creación de una nueva sociedad.

Aquellas mujeres lesbianas que además provienen de pueblos indígenas y campesinos enfrentan una triple invisibilización por ser mujeres, indígenas y pobres. El machismo existe en sus pueblos aunado al racismo de la sociedad en general y la represión económica del sistema, constituyendo el medio para negar su existencia. La resistencia cultural que ejercen principalmente las mujeres indígenas hace posible esta nación llamada México, que sin ellas no existiría.

Reclaman y afirman sus derechos a la autonomía sobre sus cuerpos así como sus territorios, en contra de todos aquellos prejuicios que limitan sus erotismos lésbicos dentro de los pueblos originarios.